Hace unos días llegué a una conclusión: odio que me digan que debo hacer.
Desgraciadamente esto también se aplica a los viajes con guías que se limitan a decir: no hagas esto, haz esto otro...para mí viajar es, ante todo, ser libre y colmar nuestra necesidad de sentirnos únicos.
Y para eso viajamos, para ver distintas culturas y poder encontrarnos a nosotros mismos entre toda esa diversidad, para sentir esa emoción única al descubrir un lugar que no aparece en los guías pero que tiene algo que nos une, misteriosamente, a él.
Por eso creo que es importante que haya muchos blogs que intenten compartir las pequeñas experiencias de cada uno, sin establecer normas, simplemente dando consejos que puedan ser útiles.
Así que seguid viajando, siendo libres y publicad, aunque nadie lo lea, aquellos lugares maravillosos en los que habéis estado porque quizás alguien, al otro lado del globo, tenga el mismo sentimiento que vosotros escondido en su interior y descubra, a través de vuestros ojos, un lugar nuevo.
Con este breve mensaje quiero animar a todas aquellas personas que hagan pequeños blogs y incitaros a que me envieis vuestros relatos para publicarlos en este espacio.